Polin
Ha vuelto la sonrisa que un día perdiste, que perdiste al abrirte al mundo con tu voz y contar tu pena y dolor. Dolor en tu cuerpo y alma que gritabas en silencio. En ese silencio caminabas buscando un lugar que te ayudara a encontrar nuevamente la tranquilidad y seguridad perdida.
Hoy te veo que has encontrado un refugio y luz para retomar tu camino. Admiro profundamente tu valentía, grandeza y perseverancia.
Como tú mamá, me alivia esta pena grande, cuando veo que empieza a esbozarse tu sonrisa que se abre al mundo.